A golpes de silencio voy viviendo.
A golpes de dolor, que hiere y mata,
mi vida va pasando, cual errata,
sintiendo que sin ti me estoy muriendo.
Cual gota de rocío que se escancia,
cayendo, suavemente, desde el cielo,
me llegan tu esperanza y tu consuelo
y colman mi vivir en la distancia.
¿Qué sería de mí y de mi cordura,
sin poder abrazarme a tu dulzura,
sin poderme amarrar alma con alma,
y desde suaves brisas mensajeras
enviarte en la noche mis quimeras,
que tú tornas, amor, en dulce calma?
Candela Martí
Hermoso...muy hermoso. Te seguire, si no te importa.
ResponderEliminarHorace, gracias por pasar a leerme y dejarme tus palabras.
ResponderEliminarSerá un lujo contar con tu presencia en mis versos.
Un saludo.
mi amiga , del dicho al hecho ya estoy aquí querida Candela!!! bello , bello!!!!! que amor tandulce y triste amiga! te seguiré visitando no te dejaré. Un beso y mi cariño!
ResponderEliminarM.Susana
Querida Candela:
ResponderEliminarNostálgico soneto, perfectamente bien construido. Bellísimas imágenes.
Me encanta haberte encontrado.
Un fuerte abrazo.
María Susana, muchas gracias por llegar hasta estos versos y dejar tu cariñosa huella en ellos. Es para mí una alegría saberte cerca.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
BlanNieves, me honras con tu presencia en mi página y me hace feliz reencontrarte. Sabes que admiro tu pluma desde el primer día en que te leí.
ResponderEliminarGracias por llegar y dejarme tus palabras en este soneto. Sabes que me alegra el alma saberte cerca. Estaremos en contacto.
Mi abrazo fuerte.
Dejo mi firma ante tu buen soneto. Felicidades.
ResponderEliminarAntonio, mi agradecimiento por tu huella en este soneto.
ResponderEliminarUn abrazo.